La madre lleva
a su niño
de la mano
hacia la escuela.
El gallo los ve
y se corta
apenado
las espuelas.
Quiebra el puercoespín
sus puyas
y el pez espada
su espada.
La serpiente
rompe el vaso
donde guardaba
el veneno.
El tigre
cambia sus ojos
y se recorta las garras.
Baja el león
la cabeza,
y su amiga
la jirafa,
allá en lo alto,
se cubre
los ojos
avergonzada.
La madre lleva
a su niño
de la mano
hacia la escuela.
La mañana
estrena alegre
su vestido de maestra.
“De la mano hacia la escuela”
Efrain Subero
(Pampatar, Nueva Esparta, 1931 – Caracas, 2007)